Con la frustración por no tener dinero para continuar pagando el cupo de sus hijos en una  escuela de futbol, resolvió entonces crear un centro de formación en donde estuvieran  la niña y el niño. Fundaría un nucleo de balompíe en donde él sería al tiempo, padre de familia y profesor. También su esposa iría con ellos a tocar el balón.


Desde 2015 Alex Moya aviva en los niños  y en las niñas las destrezas por el balompié. Son ochenta jóvenes atletas  que se agrupan en la Escuela Corinto Futbol Club, en la
Localidad Suba.


Con los padres de familia el ex puntero izquierdo se ha puesto de  acuerdo para  alejar  a los niños de estupefacientes.  El   potrero que ayuda a cuidar en colaboración con la  Junta de Acción  Comunal es el centro deportivo al que concurren los sábados y los domingos.


Entrar gratis a los partidos de Millonarios, fue un sueño que les hizo posible Flor Cano, una funcionaria de la institución deportiva. Entrar a las tribunas ha sido el aliciente de los jóvenes, de sus padres de familia y los abuelos  que llegan a las graderías como invitados de honor para ver a las estrellas del glorioso azul. Llegan al Estadio El Campin en  un bus que pagan entre todos.


Alex Moya cuenta  que hace diez años formó un equipo con muchachos consumidores de estupefacientes.  En su propósito deportivo ganaron un campeonato, y llevaron a su comunidad el primer trofeo. Algunos de aquellos jugadores se apartaron de la adicción, de una vez y para siempre. Otros en cambio, volvieron al consumo de drogas; “Algunos de los que me encuentro,  me saludan y me dan las gracias por haberlo intentado”.


Entre tanto, en tiempo de la Pandemia; alistan el tapabocas, y la esférica, para jugar  en el mismo equipo niños y niñas….

Profesor Alex Moya